Las empresas actualmente se enfrentan a múltiples desafíos. Hoy más que nunca se hace inminente la necesidad de generar nuevos canales de conexión con los clientes, brindar mayores facilidades de pago, reducir la fricción con los usuarios y al mismo tiempo brindar protección ante las diferentes modalidades de fraude que surgen día a día.
El consumidor demanda cada vez más rapidez y conveniencia. La inmediatez se vuelve cada vez más importante para los usuarios y el reto de las empresas es responder a esas necesidades. A continuación, mencionamos algunos retos relevantes que asumen las empresas hoy y cómo se pueden enfrentar a través de diferentes soluciones tecnológicas.
2. Brindar a los clientes y usuarios mayores canales y opciones de transacciones digitales:
Hoy más que nunca es importante brindar mayores facilidades a los usuarios para que realicen sus diligencias y transacciones a través canales digitales. Incluso activar medios digitales para personas que no están bancarizadas se ha convertido en una necesidad para llegar a otro tipo de públicos.
Una opción para afrontar este reto, pueden ser las billeteras virtuales, que brindan la posibilidad de digitalizar tarjetas de crédito y débito, permitiendo guardar dinero y realizar transacciones monetarias como (pagos y cobros) no monetarias (consultas, reportes).
Ya no se trata de simples páginas para trasladar dinero. Ahora existen aplicaciones para transferir dinero con solo un número telefónico. Esto ha permitido estar más cerca de los clientes, brindando el medio que sea más cómodo y familiar para los consumidores/usuarios.
Tener más opciones de canales digitales les brinda a las empresas una mejor posición frente al mercado, ya que facilita a los clientes la interacción y genera fidelización al otorgar facilidades de pago, evitar la movilidad y propiciar el distanciamiento social.
2. Reducir la fricción para facilitar al cliente los procesos de pago:
La fricción en el mundo digital y para este entorno, es considerada como uno de los obstáculos que se presentan en el proceso de interacción del usuario con el sistema en el que realiza una transacción. En la medida en que el cliente tiene una mejor experiencia a la hora de hacer un pago y menor fricción, se genera mayor fidelidad tanto con el canal a través del cual está haciendo la compra, como con el comercio a quien le compra o la entidad en la que está realizando la transacción.
Para reducir la fricción es importante establecer una comunicación clara y que sea tan intuitiva, que cualquier usuario, al primer contacto, entienda qué es lo que debe hacer para finalizar la transacción. También es importante solicitar sólo la información estrictamente necesaria para terminar la operación, pues mientras más formularios deba diligenciar el usuario y más pasos deba superar, se incrementa la posibilidad de abandono sin terminar la transacción digital.
Existen mecanismos de autenticación de usuarios que permiten cumplir con los protocolos de seguridad como 3D Secure 2.0 para garantizar que el usuario es el pagador autorizado, sin generar mucha fricción en el proceso de autenticación. Establecer este tipo de mecanismos incrementa las herramientas de seguridad del negocio y a su vez, reduce la fricción en el momento del pago.
3. Reducir el riesgo al fraude:
En la medida en que se activan más canales digitales, el riesgo de fraude aumenta. Pasa igual en el mundo físico: mientras más establecimientos comerciales tengas, más seguridad debes implementar para protegerlos. Es por ello que cuando se establece un canal de transacciones digitales, se deben establecer los mecanismos necesarios para mitigar al máximo estos riesgos.
Herramientas como Scudo de Placetopay sirven para controlar los riesgos y mantener una visibilidad completa sobre transacciones y pagos, así se puede ver dónde están las fallas para poder mitigarlas; incluso integrándose con el protocolo 3D Secure y Onboarding para trabajar en una estrategia mixta que permita combinar técnicas de monitoreo y prevención.
Cuando se implementan mecanismos de reducción de fraude, se realiza una inversión que favorece tanto a empresas como a usuarios, pues en la medida que se les brinden a los usuarios mayores garantías de seguridad, el nivel de confianza incrementa, por lo tanto, la relación con estos canales digitales va a ser mucho mayor.
Seguramente también están presentes en la actualidad retos de innovación, operacionales, de personal, financieros entre otros. Lo cierto es que toda crisis genera oportunidades y si las empresas aprovechan el uso de las herramientas y sistemas tecnológicos para afrontar algunos de esos retos, tendrán mayor posibilidad de ser rentables ahora y a futuro.